Las relaciones humanas interpersonales
son la interacción equitativa entre las personas en la que la comunicación
constituye una herramienta fundamental para la emisión y recepción de
información ya sea por medio de sonido, señales, gestos, etc.
Las relaciones humanas aparecen en todos
los ambientes en los cuales un ser humano se pueda encontrar. Estos ambientes
se pueden clasificar en 4 grandes grupos.
1. La familia.
2. La escuela.
3. El trabajo.
4. La vida social.
Comunicación interpersonal
La comunicación interpersonal se da entre dos personas que están físicamente próximas. Cada una de las personas produce mensajes que son una respuesta a los mensajes que han sido elaborados por la otra o las otras personas implicadas en la conversación.
Los participantes en la relación deben tomar conciencia de que el proceso comunicativo involucra dos niveles:
a) Comunicación digital: Se refiere a lo que comúnmente se conoce como comunicación verbal, ya sea de tipo oral o escrito.
b) Comunicación analógica: Esta indica cualquier otro tipo de comunicación que no involucre el uso de palabras pronunciadas o escritas.
¿Cómo se logra comprender y aceptar a las demás personas? Para lograrlo los expertos recomiendan 3 pasos:
1. RECONOCER QUE NADIE ES PERFECTO
No existe el ser humano perfecto. Por definición el ser humano es un ser susceptible del error. En los proyectos, decisiones, actividades, es probable que incurra en equivocos. Una de las grandes ganancias de las equivocaciones es que son las maneras más vívidas del aprendizaje.
La búsqueda de la perfección es absurda, totalmente absurda; es más, si se enfoca a buscar la perfección en las personas y en sí mismo, se desarrollará un comportamiento neurótico obsesivo y se volverá intolerable a los errores cometidos, y la vida se llenará de frustraciones que harán que la persona viva amargada y con un sentimiento de fracaso e incomprensión.
2. RECONOCER LOS ASPECTOS POSITIVOS Y NEGATIVOS DE LAS PERSONAS
La complejidad del ser humano lo lleva a estar compuesto por virtudes y defectos al mismo tiempo. Cada ser humano, hombre o mujer, forma una larga lista de comportamientos buenos y malos, y eso no lo hace ni mejor ni peor, simplemente lo hace ser persona.
3. ACEPTAR AL OTRO EN SU VERDADERA REALIDAD HUMANA
Las personas no son maniquíes, ni figuras de barro que moldeamos a nuestro antojo para que tengan la apariencia específica según nuestro particular capricho u ocurrencia. Las personas son como son, ni más ni menos. Aunque cada uno puede ser mejor si es que se lo propone.
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